El Parlamento Europeo trabaja en una nueva legislación para reforzar el control de las sustancias químicas que pueden ser utilizadas como precursores de explosivos.
Se trata de una de las medidas con las que la Unión Europea aspira a mejorar la lucha contra el terrorismo. Las nuevas reglas limitan las sustancias químicas que pueden ser utilizadas como precursores de explosivos en la fabricación de artefactos caseros.
Bombas caseras
La mayoría de los atentados recientes, incluidos los de París en 2015, Bruselas en 2016, así como de Manchester y Londres en 2017, se llevaron a cabo con explosivos de fabricación casera. Las sustancias químicas con las que se fabrican se pueden encontrar en diferentes productos, como detergentes, fertilizantes, combustibles especiales, lubricantes y químicos para el tratamiento del agua.
Para combatir el terrorismo y la delincuencia, la Unión Europea trabaja para reforzar las normas que regulan quiénes y cómo se puede acceder a estas sustancias. Sin embargo, como el uso de muchos de estos químicos es legítimo, las nuevas reglas se aplicarán al público en general, pero no a los profesionales, como agricultores, mineros o fabricantes de fuegos artificiales, que están obligados a utilizarlas en su actividad comercial o profesional. Con esta reforma se pretende actualizar las normas actuales, que entraron en vigor en 2013. Aunque restringen la comercialización de sustancias químicas como el peróxido de hidrógeno y el ácido nítrico, cuentan con deficiencias constatadas.
Mejoras con las nuevas normas
Los sistemas de licencia y registro actuales difieren en gran medida de un Estado miembro a otro. La nueva regulación establecerá normas a nivel europeo para la emisión de licencias al público en general con intereses legítimos. Tendrán que realizar un control de seguridad completo que incluya una verificación de sus antecedentes penales. Las normas también incluyen la aclaración de definiciones como las de «miembro del público general», que no podrá comprar estos químicos y «usuarios profesionales», que los utilizan en su trabajo.
Como los terroristas utilizan nuevas «recetas», que emplean ingredientes que no se contemplan en las normas actuales, la Comisión propone añadir más productos químicos a la lista de sustancias restringidas, como el ácido sulfúrico. Además, las nuevas normas cubren también las plataformas de compraventa en internet.
La comisión de Libertades Civiles aprobó el acuerdo con el Consejo el 19 de febrero. La versión final se votará en el pleno en abril.
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Estudio del Parlamento: Revisión de la regulación sobre precursores de explosivos (en inglés)
Evaluación de la aplicación de la legislación actual (en inglés)
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