A medida que la agresión militar ilegal a gran escala de la Federación Rusa en Ucrania se intensifica, Francia, Grecia, Lituania, Albania, Andorra, Australia, Austria, Bélgica, Bosnia y Herzegovina, Bulgaria, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Croacia, Chipre, República Checa, Dinamarca, Estonia, Finlandia, Georgia, Alemania, Honduras, Hungría, Islandia, Irlanda, Italia, Japón, Letonia, Liechtenstein, Luxemburgo, Malta, Islas Marshall, Mónaco, Montenegro, Países Bajos, Nueva Zelanda, Macedonia del Norte, Noruega, Palau, Polonia, Portugal, República de Corea, República de Moldavia, Rumanía, San Marino, Eslovaquia, Eslovenia, España, Suecia, Suiza, Ucrania, Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, Estados Unidos de América, Uruguay y la Unión Europea piden la protección de los periodistas ucranianos e internacionales y de los trabajadores de los medios de comunicación que cubren la guerra en Ucrania.
Las vidas y la seguridad de los periodistas y trabajadores de los medios de comunicación sobre el terreno, tanto ucranianos como internacionales, están en grave peligro. En la condena absoluta de las amenazas a la vida y la seguridad de los periodistas resultantes de la invasión ilegal de Ucrania por parte de la Federación Rusa, subrayamos que todos los periodistas y trabajadores de los medios de comunicación son civiles según el derecho internacional humanitario y no pueden ser objetivos legítimos. Sus derechos deben ser respetados y protegidos.
La seguridad inmediata de los periodistas y trabajadores de los medios de comunicación sobre el terreno -tanto ucranianos como internacionales- es nuestra preocupación fundamental en medio del creciente número de informes verificados de ataques de las fuerzas rusas contra ellos y la incesante escalada de las hostilidades civiles. Condenamos el asesinato de Brent Renaud, Yevhenii Sakun, Pierre Zakrzewski, Oleksandra Kuvshynova y Oksana Baulina en Ucrania. Los periodistas desempeñan un papel fundamental en el suministro de información durante un conflicto, y nunca deben ser objeto de ataques. Pedimos que se respete el derecho internacional humanitario, para garantizar la protección de los periodistas y los trabajadores de los medios de comunicación.
El Consejo de Seguridad de la ONU, en su resolución 2222 (2015), adoptada por unanimidad, afirma que los Estados deben respetar y proteger a los periodistas como civiles y confirma que los equipos e instalaciones de los medios de comunicación constituyen objetos civiles y no deben ser objeto de ataques o represalias. La libre circulación de información independiente y precisa es indispensable en situaciones de conflicto. La labor de los periodistas y trabajadores de los medios de comunicación es vital para ayudar a mantener la seguridad de la población y garantizar que la comunidad internacional pueda comprender todas las consecuencias de la invasión y su horrenda repercusión en las vidas humanas. La resolución 2222 también exige a los Estados que respeten la independencia profesional y los derechos de los periodistas.
Unión Europea ante la invasión de Ucrania
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Condenamos enérgicamente todos los esfuerzos por silenciar y restringir la cobertura de los medios de comunicación independientes dentro de la propia Federación Rusa acerca de la invasión rusa y las hostilidades subsiguientes. Miles de personas que protestan contra la guerra están siendo detenidas en toda la Federación Rusa. Los periodistas de la Federación Rusa que cubren las manifestaciones contra la guerra se enfrentan a un creciente acoso, arresto y detención arbitraria. El organismo regulador de los medios de comunicación rusos, Roskomnadzor, sigue intimidando a los medios independientes, bloqueando sus sitios web y obligándoles a retirar artículos. El regulador ruso también ha bloqueado el acceso a Facebook, Twitter y otros medios de comunicación extranjeros en Rusia, bajo el falso pretexto de que estaban difundiendo información ficticia sobre la guerra en Ucrania, dejando así a millones de personas en Rusia sin muchas fuentes de información en línea. Esto es inaceptable y una completa violación del derecho del público a la información independiente.
En un intento de restringir aún más la libertad de expresión, se promulgaron proyectos de ley aprobados por la Duma que modifican el Código Penal ruso y el Código de Infracciones Administrativas, introduciendo penas de hasta 15 años de prisión y creando nuevos delitos que castigan lo siguiente: desacreditar a las fuerzas armadas rusas, pedir sanciones contra Rusia y difundir «información falsa» sobre las fuerzas armadas Periodistas internacionales pusieron fin a sus reportajes dentro de Rusia debido a la preocupación de que las nuevas leyes se apliquen para garantizar que no se puedan cuestionar los esfuerzos sistemáticos de manipulación y desinformación de los canales de comunicación controlados por el gobierno ruso. Incluso el periódico Novaya Gazeta, cuyo redactor jefe, Dmitry Muratov, fue galardonado con el Premio Nobel de la Paz en 2021, y siete de cuyos periodistas fueron asesinados en las últimas dos décadas a causa de sus reportajes, se ha visto obligado a obedecer la censura en su cobertura de la guerra en Ucrania.
Condenamos este indefendible atentado a la libertad de expresión y de opinión, así como a la libre expresión sobre asuntos de interés público. La libertad «de buscar, recibir y difundir informaciones e ideas de toda índole, sin consideración de fronteras, ya sea oralmente, por escrito o en forma impresa o artística, o por cualquier otro procedimiento de su elección» está protegida por el artículo 19.2 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos. Estos delitos penales constituyen una completa contradicción con la noción de que las personas pueden expresarse sin obstáculos.
Rusia: Declaración del Alto Representante Josep Borrell sobre el periódico independiente ruso Novaya Gazeta
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También condenamos la represión generalizada de los medios de comunicación independientes en Bielorrusia, país que permitió el ataque militar de la Federación Rusa a Ucrania desde su territorio. Treinta y dos periodistas y trabajadores de los medios de comunicación siguen entre rejas en Bielorrusia, según la Asociación Bielorrusa de Periodistas.
Hacemos un llamamiento a la unidad de la comunidad internacional para proteger los derechos y la seguridad de los periodistas y trabajadores de los medios de comunicación en Ucrania, y pedimos ayuda humanitaria urgente para los periodistas y trabajadores de los medios de comunicación en Ucrania para que puedan seguir realizando su trabajo con seguridad. Nos unimos a todos los gobiernos interesados, a las ONG internacionales y a las organizaciones de periodistas para que hagan todo lo posible para apoyar a los periodistas que se vean obligados a huir del país, y que puedan querer establecer bases de información en el extranjero.
La libertad de prensa y el acceso libre y sin trabas a la información, tanto en línea como fuera de ella, serán la única forma posible de verificar y ser testigo de los acontecimientos actuales en Ucrania. Unos medios de comunicación libres, abiertos e independientes que informen en interés del público y pidan cuentas al poder, al tiempo que faciliten el acceso a una información libre, verificada e imparcial, son esenciales en los procesos democráticos, protegiendo los derechos humanos y las libertades fundamentales, especialmente el derecho a la libertad de expresión, de reunión pacífica y de asociación.
Más información: Servicio Europeo de Acción Exterior – Comunicado de prensa
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