En 2022 se produjeron casi 2,97 millones de accidentes laborales no mortales en la UE, lo que supone un aumento del 3% respecto a los 2,88 millones de 2021 (+ 87 139 accidentes no mortales más). Este aumento se debe probablemente a la reactivación económica en 2022, que siguió a la ralentización general relacionada con la pandemia COVID-19.
En 2022, 3 286 accidentes laborales fueron mortales, lo que representa el 0,1% de todos los accidentes. Esto supuso 61 accidentes mortales menos que en 2021 y 122 menos que en 2013.
Esta información procede de la recopilación de datos de las Estadísticas europeas de accidentes de trabajo (EEAT) que ha publicado hoy Eurostat. Este artículo presenta un puñado de conclusiones de un artículo más detallado de Statistics Explained sobre accidentes laborales.
En toda la UE, se produjeron de media 1,66 víctimas mortales por cada 100 000 personas empleadas en 2022, frente a las 1,76 de 2021. La tasa de incidencia se ha mantenido por debajo de 2,0 víctimas mortales por cada 100 000 trabajadores desde 2016.
Nota metodológica
Un accidente de trabajo se define como un suceso ocurrido durante el trabajo que provoca daños físicos o mentales. Los accidentes de trabajo mortales son los que provocan la muerte de la víctima en el plazo de un año desde que se produjo el accidente. Los accidentes de trabajo no mortales se definen como aquellos que implican al menos cuatro días naturales completos de baja laboral (a veces también se denominan «accidentes de trabajo graves»). Es probable que el número de accidentes en un año concreto esté relacionado en cierta medida con el nivel general de actividad económica de un país y el número total de personas empleadas en su economía.
Más información: Eurostat.
Deja una respuesta