La pandemia de COVID-19 tiene un impacto negativo en la salud y los derechos de las mujeres, por lo que los eurodiputados instan a los Estados miembros a proteger y mejorar aún más la salud y los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres.
En el proyecto de informe aprobado por la Comisión de Derechos de la Mujer e Igualdad de Género por 27 votos a favor, 6 en contra y 1 abstención, los eurodiputados señalan que el derecho a la salud, en particular los derechos a la salud sexual y reproductiva (SDSR), son derechos fundamentales de las mujeres que deben ser potenciados y no pueden ser en ningún caso suavizados o retirados.
Añaden que las violaciones de los DSSR de las mujeres son una forma de violencia contra las mujeres y las niñas y obstaculizan el progreso hacia la igualdad de género. Por lo tanto, piden a los países de la UE que garanticen el acceso a una gama completa de SDSR de alta calidad, integral y accesible, y que eliminen todas las barreras que impiden el pleno acceso a estos servicios.
Acceso al aborto, anticonceptivos y la educación sexual
Los eurodiputados de Derechos de la Mujer e Igualdad de Género subrayan que algunos Estados miembros siguen teniendo leyes muy restrictivas que prohíben el aborto salvo en circunstancias estrictamente definidas, lo que lleva a las mujeres a tener que buscar abortos clandestinos o llevar su embarazo a término en contra de su voluntad, lo que supone una violación de sus derechos humanos. Por ello, instan a todos los Estados miembros a que aseguren el acceso universal al aborto seguro y legal, y a que garanticen que el aborto a petición sea legal en las primeras etapas del embarazo, y más allá si la salud de la embarazada está en peligro. También recuerdan que la prohibición total de la atención al aborto es una forma de violencia de género.
Además, los eurodiputados exigen que los países de la UE garanticen el acceso universal a una gama de métodos anticonceptivos y suministros de alta calidad, asesoramiento familiar e información sobre anticoncepción.
También instan a los Estados miembros a que garanticen el acceso a una educación sexual integral para los niños de primaria y secundaria, ya que la educación en SDSR puede contribuir significativamente a reducir la violencia y el acoso sexual.
El impacto negativo de la pandemia en la salud de las mujeres
Lamentando que el acceso al aborto siga siendo limitado durante la crisis del COVID-19, así como los efectos que la pandemia ha tenido en el suministro y acceso a los anticonceptivos, los eurodiputados instan a los países de la UE a considerar el impacto sanitario de esta crisis a través de una lente de género y a garantizar la continuidad de una gama completa de servicios de SDSR a través de los sistemas de salud.
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