Han pasado más de tres décadas desde que Shoshana Zuboff publicó su libro, The Age of the Smart Machine.
Ya en su momento, predijo muchos de los desafíos, tendencias y formas en que la tecnología ha influido en nuestras vidas y carreras. Fue, como muchas de las obras de Shoshana Zuboff, adelantado a su tiempo. Por supuesto, el mundo que nos rodea y la tecnología que usamos todos los días ha cambiado mucho desde entonces. En los últimos 20 años nos hemos sumergido gradualmente en una web mundial que nos ha traído enormes beneficios inimaginables. Pero como cualquier cambio y oportunidad importantes, esto también ha creado nuevos riesgos y preocupaciones. Y es por eso que necesitamos el trabajo de personas como Shoshanna Zuboff.
Necesitamos pensadores, críticos y personas que desafíen la sabiduría recibida. Esto es lo que, Soshana, ha hecho a lo largo de su carrera como autora, así como a través de su enseñanza e investigación en Harvard, donde comenzó su carrera como estudiante y luego se convirtió en una de las primeras mujeres en la escuela de negocios de Harvard. Sus ideas y visiones cambian los mercados e influyen en la cultura. Su trabajo pionero ha abierto los ojos y las mentes de las personas sobre los efectos sociales del mercado digital. Su último trabajo, The Age of Surveillance Capitalism, es el ejemplo perfecto de esto.
Discurso
En el discurso dado en la ceremonia de entrega de premios Axel-Springer 2019 en Berlin, Shoshana Zuboff, apuntaba a que Europa tendrá que trabajar duro para aumentar su peso en la era digital. El éxito a largo plazo también es una cuestión de soberanía. Tecnológicamente, hay que desarrollar soluciones y estándares europeos (AI, 5G, Cloud de próxima generación). Para proteger al individuo, se necesita un enfoque dual: aumentar la alfabetización digital de nuestros ciudadanos y crear las reglas necesarias para que las empresas garanticen una actitud responsable hacia los datos. Por último, pero no menos importante, también será una cuestión de mantener los altos estándares del estado de derecho y la apertura cultural que hacen que Europa sea tan atractiva para los mejores talentos de la era digital. Si se cumplen estas condiciones, Europa tiene una oportunidad justa de dar forma al mundo digital.
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