El Consejo de la Unión Europea ha adoptado unas conclusiones en las que aborda los urgentes desafíos que plantean la desertificación, la degradación del suelo y la sequía (DDTS), subrayando la necesidad crítica de un planteamiento cohesivo e integrado de la gestión medioambiental en toda la UE. Estas conclusiones ponen de relieve la creciente frecuencia y gravedad de las sequías, junto con la exacerbación de la desertificación y la degradación del suelo tanto a nivel mundial como en Europa.
El Consejo insta a la Comisión Europea a que proponga un plan de acción global a escala de la UE destinado a combatir la DDTS, con el objetivo de aumentar la resiliencia a la sequía y lograr la Neutralidad de la Degradación de la Tierra (NDT) para 2030.
Reconociendo la interconexión de las cuestiones medioambientales, el Consejo invita a la UE y a sus Estados miembros a que destaquen la importancia de la gestión y la gobernanza regenerativas de la tierra en sus acciones exteriores. El compromiso y las alianzas constantes en materia de DDTS son vitales para fomentar el desarrollo sostenible y abordar los desafíos polifacéticos de la degradación de la tierra.
Financiación coherente
Las conclusiones reconocen la necesidad de estrategias de financiación coherentes para apoyar la gestión y restauración sostenibles de la tierra. El Consejo pide que se revisen los instrumentos de financiación existentes y que se exploren fuentes alternativas de financiación privada y mixta, en particular para hacer operativas las acciones de la DDTS y llevar a cabo acciones de restauración de los ecosistemas mediante soluciones basadas en la naturaleza.
Transformar la agricultura y los sistemas alimentarios
Para alcanzar la NDT en 2030, el Consejo hace hincapié en la necesidad de transformar la agricultura y los sistemas alimentarios hacia la sostenibilidad, la resistencia a la sequía y las prácticas climáticamente inteligentes. Esta transformación debe guiarse por los 13 principios de la agroecología definidos por el Grupo de Alto Nivel de Expertos en Seguridad Alimentaria y Nutrición de la FAO.
Reforzar las sinergias y la colaboración
El Consejo reafirma su compromiso de abordar de manera coherente e integrada los retos interrelacionados de la DDTS, el cambio climático, la pérdida de biodiversidad, la escasez de agua y la contaminación. Al celebrarse consecutivamente la 16.ª sesión de la Conferencia de las Partes en el Convenio sobre la Diversidad Biológica (CDB), la 29.ª sesión de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) y la 16.ª sesión de la Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación (CLD), se presenta una oportunidad única para mejorar la cooperación entre las tres Convenciones de Río. Esta colaboración apoyará la aplicación de la Agenda 2030 de las Naciones Unidas para el Desarrollo Sostenible y sus Objetivos de Desarrollo Sostenible asociados.
El Consejo insiste firmemente en la necesidad de mejorar la colaboración entre el CDB, la CMNUCC y la CLD a todos los niveles. Hace un llamamiento para que se refuercen las sinergias, en particular en la aplicación del Marco Mundial para la Diversidad Biológica, el Acuerdo de París y el Programa de Establecimiento de Objetivos de Neutralidad de la Degradación de la Tierra. Dicha colaboración es esencial para desarrollar y aplicar estrategias nacionales eficaces que aborden la biodiversidad, la adaptación al clima y la DDTS de forma sinérgica.
Más información: Consejo Europeo
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