En un momento en que el panorama político mundial está siendo reconfigurado por la competencia estratégica, la creciente inestabilidad global y los intentos de socavar el orden internacional basado en normas, la UE necesita un plan estratégico claro y un marco de actuación sólido.
Frente a retos sin precedentes, que van desde la guerra de agresión de Rusia contra Ucrania, la lucha contra el cambio climático, la situación en Oriente Medio y la mitigación del impacto de la pandemia COVID-19, la UE ha salido fortalecida y más unida. Para continuar por este camino, la UE atenderá las aspiraciones de sus ciudadanos y reforzará su competitividad, se convertirá en el primer continente neutro desde el punto de vista climático, abordará la migración y asumirá el liderazgo a la hora de afrontar los retos mundiales.
En su reunión de Bruselas del 27 de junio de 2024, el Consejo Europeo acordó la Agenda Estratégica 2024-2029. En ella se establecen las prioridades y orientaciones estratégicas de la UE.
Ante un panorama mundial cambiante y una creciente inestabilidad, la agenda estratégica hará que Europa sea más soberana y esté mejor equipada para hacer frente a los retos inmediatos y futuros. Se estructura en torno a tres pilares:
- una Europa libre y democrática
- una Europa fuerte y segura
- una Europa próspera y competitiva
Una Europa libre y democrática
Valores como el respeto de la dignidad humana, la libertad, la democracia, la igualdad, el Estado de Derecho y el respeto de los derechos humanos, incluidos los derechos de las personas pertenecientes a minorías, son la principal fuerza de la UE, así como su brújula tanto dentro de la UE como a escala mundial.
Estos valores son también la base de una unión más fuerte, más próspera y más democrática para los ciudadanos.
Para defender estos valores dentro de la UE y fuera de ella, las prioridades del Consejo Europeo en este ámbito incluyen:
- promover y salvaguardar el Estado de Derecho;
- reforzar la resiliencia y el debate democrático;
- proteger unos medios de comunicación y una sociedad civil libres y pluralistas;
- hacer frente a la injerencia extranjera y a los intentos de desestabilización;
- garantizar que los gigantes tecnológicos asuman la responsabilidad de salvaguardar los debates democráticos en línea;
- defender la Carta de las Naciones Unidas y promover la paz, la justicia y la estabilidad mundiales;
- trabajar por un sistema multilateral reformado y más inclusivo.
Los líderes de la Unión Europea comienzan en Granada el debate sobre la agenda estratégica 2024–2029 |
Una Europa fuerte y segura
En un mundo que se ha vuelto más conflictivo, cambiante e incierto, la UE debe ser capaz de adaptarse y, al mismo tiempo, reafirmar su ambición y su papel como actor estratégico mundial. Europa debe ser un lugar donde las personas sean y se sientan libres y seguras.
En este ámbito, las prioridades del Consejo Europeo incluyen:
- apoyo continuo a Ucrania, incluida su reconstrucción y la búsqueda de una paz justa
- una mayor preparación y capacidad de defensa de la UE y un aumento del gasto y la inversión en defensa
- la cooperación con los socios transatlánticos y la OTAN
- la lucha contra la delincuencia organizada, la radicalización, el terrorismo y el extremismo violento
- el refuerzo de la capacidad de resiliencia, preparación, prevención de crisis y respuesta para proteger a los ciudadanos y las sociedades frente a distintas crisis, como las catástrofes naturales y las emergencias sanitarias
- un proceso de ampliación de la UE basado en los méritos y con incentivos, que discurra en paralelo a las reformas internas necesarias
- un enfoque global de la migración y la gestión de las fronteras
Una Europa próspera y competitiva
La UE está decidida a reforzar su competitividad a largo plazo y a mejorar el bienestar económico y social de los ciudadanos. Esto incluye aumentar su poder adquisitivo, crear buenos puestos de trabajo y garantizar la calidad de los bienes y servicios. Para reforzar la soberanía de Europa en sectores estratégicos y convertirla en una potencia tecnológica e industrial, las prioridades de la UE en este ámbito son las siguientes:
- un mercado único más fuerte, sobre todo en los sectores de la energía, las finanzas y las telecomunicaciones;
- un importante esfuerzo de inversión colectiva, movilizando tanto la financiación pública como la privada, en particular a través del Banco Europeo de Inversiones y de mercados de capitales europeos integrados;
- una política comercial ambiciosa, sólida, abierta y sostenible;
- reducción de las dependencias perjudiciales y cadenas de suministro estratégicas diversificadas y seguras;
- la mejora de la capacidad en tecnologías clave del futuro, como la inteligencia artificial, las tecnologías de balance cero y los semiconductores;
- las transiciones ecológica y digital, incluida una auténtica unión energética y la inversión en tecnologías digitales revolucionarias en Europa;
- un sector agrícola sostenible y resiliente;
- el fomento de un entorno propicio para la innovación y la actividad empresarial;
- el refuerzo de la cooperación sanitaria a escala europea e internacional;
- inversión en formación y educación.
Más información: Consejo Europeo
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