Aunque todavía se desconocen todas las consecuencias derivadas de la crisis de Covid-19, se estima que la pandemia tendrá un impacto significativo en las tasas de natalidad y mortalidad, así como en los flujos migratorios en Europa.
Las regiones con una población que se reduce rápidamente se ven afectadas por una grave brecha en la prestación de servicios sociales (sanitarios, culturales), físicos (transporte) y conectividad TIC, educación y oportunidades laborales.
Principales causas detrás de los cambios demográficos regionales
Las regiones despobladas suelen ser áreas rurales con bajos ingresos o postindustriales, sin muchas perspectivas para la población activa. El éxodo de los trabajadores jóvenes y capacitados repercute en el envejecimiento de la población, la regeneración generacional y en el desarrollo rural.
Gracias a la libre circulación de la mano de obra, una de las «cuatro libertades» de la Unión Europea y su mercado único, la crisis económica de 2008 fomentó los desplazamientos de profesiones jóvenes con estudios desde el sur y el este al norte y oeste de Europa.
La crisis de Covid-19 puede continuar con esta tendencia. La reducción de la actividad económica y la falta de empleo son alicientes para que se generen nuevos flujos migratorios de los jóvenes tanto dentro de los propios Estados miembros como entre ellos.
¿Qué quiere el Parlamento?
Los eurodiputados quieren que el reto demográfico sea una prioridad para la Unión Europea, junto al cambio climático y la transición digital. Sostienen que se necesita un enfoque común, que integre los principios de sostenibilidad y digitalización en diferentes políticas de la UE, contribuirá a revertir las tendencias demográficas negativas.
Los países de la UE y las autoridades locales tienen un papel fundamental a la hora de responder a estos cambios. Como socios del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia, deberían ser los encargados de llevar a cabo planes de recuperación para las regiones más vulnerables.
El Parlamento quiere que la UE tenga en cuenta las regiones rurales y remotas en su estrategia de movilidad: las redes de transporte pueden detener la despoblación al reforzar la conexión entre las áreas rurales y urbanas.
El fomento del turismo rural también juega un papel importante a la hora de atajar la reducción de la población, ya que incentivaría la creación de empleo, así como la diversificación económica y demográfica de las áreas rurales.
Las inversiones en el sector digital deberían permitir una transición justa y equitativa hacia una economía digital y un sistema educativo digital en línea accesible para todos los ciudadanos. Estas medidas acabarían con la brecha digital puesta de manifiesto durante la pandemia, que afecta sobre todo a las personas mayores y a las personas que viven en regiones menos desarrolladas La pandemia ha revelado una brecha digital que afecta en particular a las personas mayores y a las personas que viven en regiones menos desarrolladas.
La expansión del teletrabajo durante la crisis de Covid-19 podría ayudar a revertir las tendencias de despoblación en las áreas rurales, al permitir que los jóvenes con estudios no tengan que mudarse.
Abordar los desequilibrios demográficos refuerza la cohesión económica, social y territorial de la Unión y es una forma de contrarrestar la radicalización.
Tendencias demográficas en la UE
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Despoblación de ciertas regiones: declives significativos en el este y el sur de Europa debido a la combinación de los desplazamientos desde estas regiones al norte y el centro de Europa con las bajas tasas de natalidad
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Dinámica de fuga o captación de cerebros: las regiones de origen pierden a personas altamente capacitadas y cualificadas, lo que pone en ventaja a las regiones que las reciben, debido a la emigración permanente
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Brecha entre las zonas urbanas y las rurales: las zonas rurales representan el 44% del área de la Unión Europea, mientras que el 78% de la población vive en zonas urbanas o en áreas urbanas funcionales
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Envejecimiento de la población: debido al incremento de la esperanza de vida, se prevé que el 30,3% de la población en 2070 tenga 65 años o más (frente al 20,3 % en 2019)
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Declive de la población: en 2015, la UE experimentó su primer declive natural de la población al registrar más muertes que nacimientos; se espera que la población se reduzca significativamente a largo plazo.
Más información:
Previsiones demográficas de la UE para 2021 (inglés)
Informe de la comisión de Desarrollo Regional (inglés)
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