El pasado 3 de diciembre, la Comisión Europea y la Alta Representante presentaron una Comunicación conjunta sobre el refuerzo de la seguridad económica. En ella se esbozan medidas concretas para reforzar la fortaleza y resistencia de la UE frente a las crecientes amenazas económicas externas, manteniendo al mismo tiempo nuestra apertura y compromiso con el comercio y la inversión internacionales.
La Comunicación conjunta se basa en la Estrategia de Seguridad Económica de 2023, que establece los objetivos generales de seguridad económica de promover los puntos fuertes industriales, proteger los intereses europeos y asociarse con países de ideas afines.
Esta Comunicación establece el enfoque reforzado de la UE para hacer frente a los riesgos, utilizando todas las herramientas a su disposición. Para reforzar su seguridad económica, la UE utilizará las herramientas existentes con independencia de su finalidad original y desplegará su arsenal de forma más proactiva cuando sea necesario. También mejorará sus capacidades de recopilación de información y análisis para fundamentar las decisiones de la UE y mejorar la coordinación con los Estados miembros y las empresas.
Un enfoque proactivo y específico
La Comunicación refleja un cambio de paradigma, pasando de una postura reactiva a un despliegue de herramientas más proactivo y sistemático. La UE también será más estratégica a la hora de aprovechar su peso económico y el acceso a su mercado único. Las medidas de la UE seguirán siendo selectivas, proporcionadas y centradas en abordar situaciones específicas de alto riesgo. Al mismo tiempo, la UE, sus Estados miembros y las empresas tendrán que aceptar cada vez más los costes económicos que conlleva el aumento de la seguridad y la resistencia.
Basándose en el trabajo de evaluación de riesgos realizado con los Estados miembros, la Comisión se centrará inmediatamente en seis ámbitos prioritarios de alto riesgo:
- Reducción de las dependencias estratégicas de bienes y servicios;
- Atraer inversiones seguras a la UE;
- Apoyar una industria europea de defensa y espacial dinámica y otros sectores industriales críticos;
- Garantizar el liderazgo de la UE en tecnologías críticas;
- Proteger la información y los datos sensibles;
- Proteger las infraestructuras críticas europeas.
Uso coordinado y estratégico de herramientas
La eficacia de la actuación de la UE se reforzará utilizando los instrumentos existentes de forma más estratégica y coordinada. Esto incluye, por ejemplo, nuevas directrices de selección de la IED, tener en cuenta consideraciones de seguridad económica en las investigaciones de defensa comercial y dar prioridad a la financiación de proyectos que trabajen en la reducción de las dependencias de la UE.
Mejor conocimiento de la situación
La Comisión mejorará su evaluación de los riesgos, así como la recogida y el intercambio de información con los Estados miembros y las partes interesadas. Fomentará una comprensión común de los riesgos para la seguridad económica y de cómo y cuándo desplegar medidas para contrarrestarlos. Esto ayudará a la UE a intervenir de manera oportuna y eficaz. Un elemento clave será el refuerzo de la estrecha cooperación de la Comisión con las empresas, que a menudo son las más afectadas por los problemas de seguridad económica.
Completar las herramientas de seguridad económica de la UE
La UE también está trabajando en nuevas herramientas para colmar las lagunas actuales en la seguridad económica de la UE. Hoy se presenta la primera propuesta emblemática de la nueva Comunicación sobre seguridad económica, ResourceEU, centrada en abordar la excesiva dependencia europea de los proveedores extranjeros de materias primas y semiconductores esenciales. Otras iniciativas se encuentran en diversas fases de preparación y aplicación, como el Reglamento SAFE, la Ley de Aceleradores Industriales, la Ley de Desarrollo de la Nube y la IA, la Ley CHIPS 2.0, la Ley de Industria Neta Cero, la Ley de Materias Primas Críticas, la Estrategia de Puesta en Marcha y Ampliación y los Programas Espaciales de la UE.
Cooperación internacional
Europa no está ni mucho menos sola ante los retos de la seguridad económica. Teniendo esto presente, la UE intensificará aún más su cooperación con socios de confianza, fomentará normas comunes de seguridad económica y, cuando sea posible, emprenderá acciones conjuntas para hacer frente a los principales retos.
Próximos pasos
La Comisión ya está poniendo en marcha las modificaciones legislativas, directrices y otras medidas de apoyo necesarias para aplicar las acciones establecidas en la Comunicación conjunta. La Comisión seguirá trabajando intensamente con los Estados miembros, los terceros países y las partes interesadas en el nuevo enfoque estratégico de seguridad económica.
Más información: Comisión Europea







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